Ni una vida de diferencia separa un amor como este.

                Como hasta un día despejado me acuerda a ti, y no porque hayamos tenido millones de tardes despejadas de la mano, sino porque la perfección de la naturaleza me recuerda a ti, y me recuerda a ti no porque hayas sido perfecto, sino porque en tu imperfección fuiste capaz de crear cosas maravillosas en mi,
Tantas cosas que dejaste en mi que aunque no me deba sentir sola por tu ausencia, es inevitable no sentir la necesidad de verte a diario, esa necesidad de escucharte aconsejarme, e incluso la necesidad mas tonta de compartir una mirada cómplice en algunos momentos.
Cuanto daría por abrazarte de nuevo y que compartiéramos una charla juntos, así sea la ultima, talvez estando consiente de que no seria posible otra de nuevo, la viviéramos al máximo, yo la fotografiaría en mi mente como un documental para no olvidar ni por un segundo cualquier rasgo tuyo, te acariciaría tanto que mis manos serian capaz de recrearte solo al cerrar los ojos; Si tuviéramos esa ultima platica, creo que los segundos, se convertirían en minutos y los minutos en horas en un abrir y cerrar de ojos al contarte de mis pasiones, de mis miedos y de mis alegrías; En una ultima visita te invitaría a bailar por primera y ultima vez, te invitaría a que nos tomáramos un vino al caer la noche e ir al cine como tanto nos gustaba a ambos; Por ello, como no preguntarme a diario cuantas cosas hubiésemos podido hacer juntos, cuantas miradas nos quedaron acumuladas para nuestra próxima vida, porque de eso si estoy segura, en nuestra próxima vida cada segundo sera un recuerdo diferente que podremos vivir junto; Cada una de las vacaciones serán una aventura diferente, cargada de risas y una paz increíble al saber que por fin el rey cuidara por siempre de su princesa.

"Alessandra Gonzalez"